Solidaridad con los Cinco cruza la frontera hacia EE.UU.
Raimundo López, enviado especial
Ciudad Juárez, México, 15 oct (PL) Los asistentes al Primer Foro Social Fronterizo que continúa hoy aquí llevaron del otro lado del límite su demanda de liberar a cinco luchadores antiterroristas cubanos prisioneros en Estados Unidos.
El grito de libertad para esos jóvenes se escuchó en la línea divisoria entre las dos naciones, sobre el puente internacional Paso Norte, que comunica Juárez con la vecina ciudad estadounidense de El Paso, Texas.
En el lugar se concentraron centenares de representantes de unas 150 organizaciones de los dos países, al términar anoche una marcha de protesta contra la nueva muralla que decidió construir en la frontera el gobierno norteamericano.
Estamos aquí para exigir también la libertad de los cinco compañeros cubanos injustamente encarcelados en Estados Unidos, exclamó en su discurso Cipriana Jurado, activista del Centro de Investigación y Solidaridad Obrera, de Juárez.
Libertad, libertad, corearon los manifestantes, entre otras consignas como "abajo el muro de la muerte", "no nos moverán" y "qué queremos: justicia, ahora", entre otras.
Horas antes, el Foro fue conmovido por el desgarrador testimonio de Mirta Rodríguez, una anciana madre de uno de esos cinco luchadores contra el terrorismo, Antonio Guerrero, condenado a cadena perpetua.
El tema fue incluido como uno de los paneles de la cita y el sábado Rodríguez denunció en la plenaria las crueldades cometidas contra los Cinco y las violaciones a la constitución norteamericana para condenarlos.
Narró que también sus familiares son víctimas de una guerra psicológica y a esposas e hijos se les niegan las visas para visitarlos con multiples pretextos y a quienes se la otorgan, como a ella, es una sola vez al año y en los peores momentos climáticos.
Tanto Rodríguez como el diputado cubano Leonel González agradecieron al Comité Organizador haber incluido el tema en la agenda del Foro y los exhortaron a romper el muro de silencio imnpuesto por Washington en torno al caso.
El delegado puertorriqueño Juan Rosario aseguró a Prensa Latina haber escuchado con estupor el relato de Rodríguez, pues no tenía noticias del caso, a pesar de ser periodista y tener una vida activa en las luchas sociales.
El Imperio tiene una perversa y efectiva maquinaria para acallar o silenciar a todos los que buscan un mundo mejor o una causa justa, pero al final no lo puede lograr, afirmó.
Michael Guerrero, un joven activista de la Alianza de Justicia Social de Base y quien comentó desde la tribuna la denuncia del caso de los Cinco, afirmó que los delegados saldrán del Foro con el compromise de apoyarlos.
Ojalá podamos derrumbar este muro de silencio sobre ellos y todos los otros que levantan en la frontera, dijo.
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